Plaguicidas

Los plaguicidas se utilizan ampliamente en la industria agrícola para proteger los cultivos contra los insectos, las malezas, los hongos y otras plagas. Protegen o aumentan los rendimientos, permitiendo que los cultivos crezcan en la misma tierra varias veces al año. Junto con la industria agrícola también se utilizan para controlar las malezas de los hogares, reducir las plagas de insectos cerca de las carreteras y los parques públicos y salvar vidas mediante el control del número de mosquitos para reducir los casos de paludismo y dengue.

Hay cientos de plaguicidas que se utilizan por diferentes razones y pueden tener una serie de efectos toxicológicos. Los plaguicidas pueden filtrarse a través del suelo hasta las aguas subterráneas o escurrirse hasta las aguas superficiales, causando un daño generalizado y perjudicial para el medio ambiente, los seres humanos y la vida silvestre. Al cultivar, los plaguicidas también pueden bioacumularse en los productos, siendo potencialmente tóxicos para los seres humanos.

Tratamiento del Agua

Los plaguicidas suelen eliminarse del agua mediante métodos de membrana como la ósmosis inversa (OI), los filtros de carbón activado granulado (CAG) o mediante el intercambio de iones. El método de tratamiento seleccionado dependerá de una serie de factores, comúnmente las especificaciones del agua de alimentación y del producto, y el costo.

Nuestra Tecnología

Nuestra tecnología CIF^® (filtración iónica continua) combina el intercambio iónico continuo y la filtración física en un solo proceso. Utilizando una resina de intercambio iónico cuidadosamente seleccionada, se pueden eliminar los plaguicidas de la mayoría de las corrientes de aguas residuales. CIF® es un proceso robusto en el que normalmente no se requiere pretratamiento, y se puede utilizar para atacar una variedad de impurezas.

Nuestra tecnología de evaporación y cristalización EVAPX™ puede tratar la salmuera altamente concentrada de la ósmosis inversa para proporcionar una solución de descarga cero líquidos (ZLD) para las centrales eléctricas. El uso del calor residual de la central eléctrica como parte del proceso de evaporación puede causar una gran reducción del costo operativo.